Galletas de Puntillitas

Hace tiempo que tenía en mente hacer unas galletitas algo diferentes a las habituales, hoy me he liado la manta a la cabeza y venga a amasar galletas, bueno mejor dicho a cortar galletas ya que la masa ya la tenía hecha y congelada.

Normalmente cuando me dispongo a hacer masa para galletas hago siempre bastante cantidad y la que no utilizo en unos días la congelo.

Es una masa que queda perfecta, y en un momento dado puedes hornear unas galletas caseras,  es el caso de estas que hoy os muestro. Tenia una porción de masa congelada y me fue perfecto, las preparé y las hornee en poco rato.  Siempre hago el mismo sistema un día hago la masa (pueden conservarse en la nevera varios días) pero la que no gasto la congelo y la tengo preparada para cualquier ocasión.  Es demasiado trabajo hacer la masa y decorarlas a la vez.

Nos han ido perfectas para preparar una merienda un poco especial.

La receta de la masa es de Bea Roque, la encontrareis en este enlace el rincon de bea es la misma que utilizo para hacer las galletas glaseadas,  pero en esta ocasión he pensado en decorarlas haciendo dibujos con los moldes que se utilizan para hacer las galletas Linzer, pero es evidente que se pueden hacer otros modelos, yo a estas las llamo galletas de puntillitas por sus formas redondeadas parecidas a los festones bordados y sus acabados me recuerdan a las puntillas aquellas antiguas.  Las galletas Linzer me encantan son muy bonitas pero llevan mermelada y hay que consumirlas rápidamente porque se reblandecen. En cambio estas duran muchos días.

Aquí dejo un pequeño paso a paso de como debemos trabajarlas:

Primero dividiremos la masa en cuatro partes y estiraremos cada parte con el rodillo, la meteremos en la nevera hasta que endurezca. Si la masa está blanda no podremos cortarlas y no nos quedarán bien.
En la tercera instantánea están los utensilios utilizados:  moldes grandes para cortas el contorno,  y  pequeñitos (caja pequeña) para hacer las formas internas, también he utilizado un palillo con la punta muy finita para  los puntitos y una cañita de bebidas para hacer circulitos pequeños.  Puedes hacer tus propios diseños a gusto de cada uno. Después de cortadas y acabadas de decorar las depositaremos de nuevo en la nevera en la placa de horno ya preparada con el papel sulfurizado para que endurezcan antes de hornearlas y no tenerlas que mover.

La porción que no gastemos la congelaremos (una vez descongelada no volverla a congelar) envuelta en el film transparente tal cual para otra ocasión. El día que la queramos utilizar de nuevo solamente debemos descongelarla sólo lo necesario para poder hacer las formas y decorarlas.

Con los recortes que nos queden podemos volver a estirarla y meterla en la nevera de nuevo antes de volverla a utilizar.
Las hornearemos a 180 grados durante 10/12 minutos en mi horno, pero puede variar en función de cada horno.


Y aquí están listas para degustar.

 Para la merienda nos fueron que ni pintadas.